Lifting facial: recupera el atractivo de un rostro joven

 

¿En qué consiste un lifting facial? 

 

Nuestro rostro es nuestra seña de identidad. El rostro refleja nuestras fortalezas y debilidades, nuestro estado de ánimo, nuestras alegrías y nuestras inseguridades… es, como bien dice la expresión, el espejo de nuestra alma.

 

El rostro permite que nos vistamos con una determinada expresión dependiendo de las circunstancias. Pero con el paso de los años nuestras expresiones cambian y los rostros varían.

A partir de los 40 nuestra fisonomía muestra signos evidentes de las actitudes que han dominado nuestra vida.

Aparecen las arrugas que son como las “marcas” de las expresiones más habituales de una persona: una boca que tiende hacia abajo puede ser el reflejo de una persona que no solía sonreír, las arrugas de la frente pueden indicar preocupación, mientras que las líneas de expresión alrededor de los ojos y de la boca y las cavidades y pliegues alrededor de los labios son señales de buen humor.

 

Estos surcos y pliegues que aparecen en el rostro fruto del envejecimiento de la piel pueden provocar que la expresión facial pierda definición y tono. Las más comunes son las arrugas alrededor de la boca y de la nariz, los surcos entre las cejas, la aparición de patas de gallo y de la tan temida papada…

El lifting o estiramiento facial es un tratamiento quirúrgico especialmente indicado para remediar estos signos propios de la edad.

 

 

¿En qué consiste el lifting facial?

Como hemos indicado anteriormente, el lifting permite mejorar los signos visibles del envejecimiento tanto en la cara como en el cuello, además de acabar con la flacidez y el exceso de piel.

Esto se consigue mediante el tensado de los músculos de la cara y el cuello, la readaptación de la piel, y la extirpación de los depósitos de grasa acumulada.

 

El lifting facial se realiza en una sola intervención, tras un estudio preoperatorio minucioso del paciente, empleando anestesia general o anestesia local y sedación. La intervención se prolonga de 2 a 4 horas, en función del caso a tratar. El ingreso hospitalario también oscilará de 12 a 48horas.

 

Las incisiones necesarias para el lifting se realizan alrededor de la oreja y por debajo el mentón, para que sean prácticamente imperceptibles a la vista, aunque también es muy habitual realizar una incisión mínima en el cuero cabelludo sobre la línea del cabello por delante de las orejas, o dirigida hacia la patilla.

Una vez que se han realizado las incisiones se procede a reposicionar las capas musculares, la piel y la grasa, tensando la musculatura facial y retirando el tejido sobrante. Cuando ya se ha terminado con el procedimiento se suturan las incisiones con puntos.

 

El lifting, además de tratar la piel, actúa sobre las estructuras grasas y musculares de la cara, lo que permite conseguir unos resultados naturales y duraderos a largo plazo.

 

 

 

El lifting puede combinarse con otras cirugías faciales:

• La cirugía de párpados o blefaroplastia para eliminar la piel flácida y las bolsas de grasa de los párpados tanto superiores como inferiores.
• La cirugía sobre los músculos y las bandas del cuello para corregir el exceso de piel o grasa en la parte inferior del mentón, o las bandas cervicales marcadas.
• La liposucción de cara y cuello
• Foto-rejuvenecimiento con láser
• Relleno de las arrugas más profundas
• Tratamiento de las arrugas dinámicas conn Botox

 

¿Cómo es el postoperatorio?

Durante el período de postoperatorio son comunes los hematomas, la hinchazón, la sensación de tirantez, la falta temporal de sensibilidad en el rostro y la piel seca. Problemas asociados que pueden prolongarse durante horas, días o semanas; estas complicaciones pueden combatirse tomando analgésicos (previamente prescritos por el cirujano).

Los puntos, producto de las incisiones se retirarán a la semana.

Además, el paciente tendrá que dormir con la cabeza elevada, por lo menos, durante un par de semanas. El tabaco está terminantemente prohibido porque puede provocar complicaciones como hematomas o sangrado.

 

 

 

El paciente podrá volver a su trabajo a partir de las dos semanas, y realizar ejercicio físico pasado un mes. También es fundamental evitar la exposición solar para acelerar la cicatrización y la curación de las heridas.

La persona intervenida deberá acudir en diversas ocasiones a la clínica del cirujano para que pueda vigilar y controlar el postoperatorio. Los verdaderos resultados empezarán a ser visibles tras el primer mes.

 

 

 

Dr Julio Terrén es miembro de Aecep y director de la clínica  Dr. Terrén.

 

 

 

Imágenes: Aecep, Pinterest, efeblog.com, 

 

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Agradecemos a Cirujanos de AECEP por el post
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